El control de custodia de hijos es un tema legal que se refiere a la asignación y supervisión de la custodia de un niño o adolescente en caso de divorcio, separación o ruptura de una relación entre los padres. La custodia se refiere al derecho y la responsabilidad de criar y cuidar a un niño.
Existen diferentes tipos de custodia de hijos, tales como la custodia única, en la cual uno de los padres tiene el derecho exclusivo de tomar decisiones importantes sobre el cuidado del niño y el tiempo de crianza; la custodia compartida, en la cual ambos padres comparten de manera equitativa la responsabilidad de criar al niño y el tiempo de crianza; y la custodia supervisada, en la cual se designa a un tercero para supervisar las visitas entre el niño y el padre no custodio debido a situaciones de violencia doméstica o abuso.
El control de custodia de hijos es llevado a cabo por el sistema judicial y está regulado por leyes específicas que varían de un país a otro. En general, los tribunales toman en cuenta diversos factores al determinar la custodia de un niño, tales como el bienestar del menor, el ambiente familiar, la capacidad de cada padre para cuidar y criar al niño, y los deseos del niño en caso de que sea lo suficientemente maduro para expresar su opinión. Para gestionar el control de custodias de hijos, los padres pueden acudir a un abogado especializado en derecho familiar para recibir asesoramiento legal y representación en el proceso judicial. También pueden recurrir a mediadores familiares que ayuden a las partes a llegar a acuerdos mutuos en relación a la custodia y visitación.
Es importante destacar que el objetivo principal del control de custodia de hijos es garantizar el bienestar y los derechos del niño, brindándole un entorno seguro y estable, y promoviendo la participación equitativa de ambos padres en su crianza.
Recopilación de información y pruebas
Un detective privado, como M12 detectives, contratado para investigar la custodia de hijos menores llevaría a cabo una serie de acciones para recopilar información y obtener pruebas relevantes. Estas acciones pueden incluir:
- Vigilancia: El detective puede llevar a cabo vigilancia discreta sobre los padres involucrados, observando sus actividades y comportamientos relacionados con los hijos.
- Investigación de antecedentes: El detective puede investigar los antecedentes de los padres involucrados, incluyendo su historial criminal, informes de abuso o negligencia infantil, problemas de salud mental, consumo de drogas o alcohol, etc.
- Entrevistas y testimonios: El detective puede entrevistar a familiares, amigos, vecinos y otras personas cercanas a los padres para recopilar testimonios sobre su comportamiento y capacidad para criar a los hijos.
- Revisión de documentos legales: El detective puede revisar documentos legales relacionados con la custodia, como acuerdos de divorcio, órdenes judiciales y evaluaciones de custodia previas.
- Verificación de cumplimiento de órdenes de custodia: El detective puede verificar si los padres están cumpliendo con las órdenes de custodia establecidas por el tribunal, como horarios de visitas, intercambios de los hijos, etc.
- Recopilación de pruebas: El detective puede recopilar pruebas en forma de fotografías, videos, grabaciones de audio, documentos u otros medios que respalden las afirmaciones hechas por uno de los padres sobre la idoneidad o el comportamiento inapropiado del otro.
Una vez recopilada toda la información y las pruebas, el detective presentaría un informe detallado a su cliente, que podría utilizarse en procedimientos legales relacionados con la custodia de los hijos menores.
Discreción y cuidado del menor
En este tipo de investigaciones debe de primar la discreción y el especial cuidado por tratarse, en la mayoría de ocasiones, de niñas y niños menores de edad, la toma de imágenes en lugares con otros niños o personas totalmente ajenas a la investigación debe de hacerse de una forma pulcra y depurada, seleccionando muy bien las tomas o tapando caras cuando sea necesario.
En la toma de contacto con los posibles clientes hay que tener muy claro el objeto de la investigación, intentando asesorar a los posibles clientes de los pros y contras, además de las posibilidades de poder llevar a cabo la investigación o por las circunstancias que rodeen al caso la también posible imposibilidad de hacerla.
Para la constatación de los hechos que queremos demostrar no basta sólo con tener conocimiento de ello de forma verbal, hay que plasmarlo en imágenes y en ocasiones, también en audio, teniendo muy en cuenta que las conversaciones de terceros entre ellos no pueden ser grabadas sin su consentimiento.
Derechos de las dos partes
En la exposición del asunto a investigar hay que tener en cuenta que además de parte que nos contrata, bien sea la madre o el padre, se debe de exponer con claridad que la otra parte tiene los derechos sobre la ejecución de la custodia que le atribuye la sentencia, o si no existe tal sentencia, los acuerdos a los que se hayan llegado, y es ahí, donde el detective privado es recurrido en bastantes ocasiones, ya que las partes se suelen olvidar que la otra parte también tiene derechos de custodia y los puede ejercer dentro de lo que se estipule en los acuerdos tomados. También se debe de tener presente que la guardia y custodia puede ser ejercida por una persona ajena a la familia, siempre que conste con el permiso de la parte que ejerce la custodia, salvo que esta persona a cargo del menor tengo algún tipo de impedimento o situación que le imposibilite ejercer esos cuidados y atenciones. Por ello, si el menor está cuidado y atendido por una persona que es ajena al padre o a la madre se debe de estudiar en profundidad el asunto, ya que, el posible cliente puede estar basando la posibilidad de realizar una contratación de un servicio de investigación privada para algo que en realidad no procede o que por lo menos es cuestionable.
Luego hay que tener en cuenta el recorrido jurídico de la investigación y el propósito que se está buscando. En M12 detectives tenemos el bagaje y experiencias suficientes para poder asesorar y ayudar a las personas que lo necesiten en este tipo de cuestiones tan importantes como es el control de custodia de hijos.
